QUÉDATE CURSO 2020/2021

Nuestro Centro:

El instituto IES Los Moriscos es un centro público dependiente de la Consejería de Educación y Empleo de la Junta de Extremadura que tiene como misión:

1. Satisfacer las necesidades y demandas en el ámbito de ESO, Bachillerato y CF.
2. Educar al alumnado teniendo en cuenta la diversidad de sus características personales.
3. Proporcionar a nuestro alumnado, mediante su esfuerzo y nuestra ayuda, una formación, tanto académica como humana, que les prepare bien para las etapas posteriores de su vida.
4. Impartir una educación de calidad, atenta a los cambios que genera la evolución social.
5. Proyectar nuestra labor educativa y cultural en el vida de la comarca. 

 

Características del Programa

 El Programa Experimental QUÉDATE fomenta el interés por desarrollar aprendizajes activos mediante Aprendizajes Basados en Proyectos, como metodología activa, estimulando el potencial de aprendizaje del alumnado participante a través de sus intereses, aumentando su motivación por continuar aprendiendo y previniendo el abandono temprano en educación.

 Destinatarios del Programa

Los destinatarios de este programa son  alumnado de 1º, 2º y 3º de E.S.O. En riesgo de abandono, fracaso escolar o con dificultades de aprendizaje (no necesariamente alumnado con necesidad específica de apoyo educativo). 

Coordinación

•  Propuesto por el equipo educativo y seleccionado por el Departamento de Orientación a través de las sesiones de evaluación inicial.
• Con los tutores de ESO, a través de las sesiones semanales  con el DO y equipo directivo.
• Profesorado Quédate: Ángel Joaquín Aceitón Godoy (Profesor de Lengua Castellana y Literatura) y Faustina Bernardino Gata (Orientadora Educativa)

Actuaciones y Experiencias 

En torno a las huertas moriscas, es un proyecto basado en nuestro entorno, lo que nos caracteriza y nos marca la distinción en la Comarca, un proyecto en el que creemos y queremos hacer partícipes a nuestros alumnos y alumnas. 

 

PARTICIPANTES

Eder, Sara, Nerea, Francisco, A. Davíd, Sofía, José, Fabián, Manuel, David y Daniel,

PREPARANDO EL TERRENO

Explosión de "malas hierbas" en los huertos.Los huertos se entienden como pequeños espacios renaturalizados donde trabajamos para devolverle a la tierra su fertilidad y su capacidad para generar vida, poniendo de nuevo en marcha los ciclos biológicos de materia y los flujos de energía dentro del ecosistema huerto.

PLANTANDO Y SEMBRANDO

Las lechugas pueden aparecer en nuestro huerto durante todo el año, aunque son una de las compañeras más amistosas de uno de los cultivos típicos del invierno, como son las coles. Seguro que alguna vez has escuchado el refrán “entre col y col lechuga, verdad”. Son muy buenas compañeras de estos cultivos, ya que además de no competir por nutrientes, tampoco compiten por espacio, pues la recolecta de la lechuga se realiza semanas antes de que las coles den el “estirón” a principios de primavera.

ÁRBOLES FRUTALES

EMPIEZA LA MAGIA

DEL HUERTO A CLASE

PRIMEROS FRUTOS

El momento de la cosecha es unos de los mejores momentos del año, pues tras meses de trabajo, cuidado y espera, ¡llega la recompensa!

RECOLECTANDO LAS PATATAS

ALREDEDORES QUE INSPIRAN

AL PRINCIPIO FUE EL CAOS.

Hola a todos.

Ardua es la tarea de crear a partir de la nada, pero…, ¡comencemos!

Los orígenes:

Avanzado brevemente el curso 2019, llegó información al IES Los Moriscos de Hornachos sobre la posibilidad de iniciar un proyecto experimental llamado QUÉDATE. Dicho programa pretendía, entre otros, objetivos tales como apoyar al alumnado con dificultades para alcanzar el éxito educativo; crear espacios con entornos diferentes a las aulas, cercanos y activos, positivos, con estrategias diferentes y motivadoras en el aprendizaje. Proyectos nuevos, aire nuevo y fresco. 

Y así empezó todo, y echando mano del refranero popular y sabio comprendimos que:  "Camarón que se duerme, la corriente se lo lleva". Y, para que no se fueran con la corriente algunos de nuestros alumnos y para que con la corriente no nos dejáramos llevar los docentes; nos paramos, respiramos, pensamos y actuamos. Y decidimos embarcarnos en esta "aventura."

Consideramos que, no es que empezáramos a crear a partir de la nada, sino que, por el contrario, comenzamos a crear con SALUD, con TIEMPO y con GANAS y…, la luz se hizo.

Y junto con algunos compañeros del equipo de orientación, equipo directivo, docentes, alumnado y "parentela", parimos este proyecto que pretende quedarse "in saecula saeculorum" en estos, nuestros lares.

Se denomina, En torno a las huertas moriscas, porque no podía faltar en nuestro entorno algo que nos caracteriza y nos da esa marca de singularidad con respecto a nuestros pueblos vecinos: las huertas moriscas. Grande es nuestro pasado con respecto a esta cultura.

Pretendimos pues, crear un espacio de aprendizaje diferente y motivador con la colaboración de todos los agentes que componen el panorama educativo, un sitio en el que compartir, enseñar, aprender y disfrutar. Un lugar en el que poder visualizar cómo con esfuerzo y tesón, con fuerzas y ganas, con actitud y esperanza se puede llegar a conseguir todo lo que uno se proponga. Esperamos conseguirlo. 

Sin más.

Saludos

 

 

EL EQUIPO

Pues bien, estos somos nosotros. Dispuestos a todo.

ANALIZANDO EL TERRENO.

Comenzamos analizando el terreno, escapando de la umbría y de los suelos más duros cercanos al Cerro de los alacranes, para localizar la ubicación más óptima de nuestro huerto. 

Estamos alegres, contentos, animosos. Hay tosca. Como roca. ¡Ánimo marañones!

POSIBLES UBICACIONES.

Después de hacer las correspondientes catas del suelo, nos encontramos con que las posibles ubicaciones de nuestro huerto podían ser alguna de las que a continuación se muestran. 

Decidimos quedarnos con la más cercana al edificio porque se dispone de sol abundante, riego cercano y porque el terreno parecía ser el más propicio.

ARANDO.

Tras considerar el terreno propicio, el primer paso fue ararlo. 

El suelo estaba muy duro. Por este motivo se decidió que esta labor la llevara a cabo un vecino de la localidad con maquinaria agrícola pesada, con su tractor. 

Nos costó un poco que entrase hasta el sitio. Llevaba el arado enganchado y había zonas en las que el paso era estrecho. Aun así lo conseguimos,  aunque nos encontramos con la dificultad de la dureza de una tierra que nunca había sido labrada, en la que las "palillas" del arado rebotaban "como pelotas en el suelo". 

Al final, como todo en la vida, "el que sigue, lo consigue".  Aquí tenéis el resultado.

PREPARANDO EL TERRENO.

Una vez arado, preparamos las lindes, acotamos el terreno y despejamos de piedras y malas hierbas los alrededores.

AÑADIENDO SUSTRATO.

Una vez arado el terreno, pensamos en añadirle sustrato al suelo. Este suelo no es el más adecuado,  por eso le echamos tierra lama. Una buena idea.

Para esta acción contamos con la ayuda de una empresa de áridos que nos facilitó 9 metros de este tipo de sustrato. 

También, como cuando realizamos la roturación del terreno, tuvimos algún problemilla para acceder al lugar, pero logramos salvar los escollos y continuar adelante.

Aquí estamos dándole vueltas "al asunto" porque ahora toca extenderla.

UNOS CARDAN LA LANA Y OTROS EXTIENDEN LA LAMA.

Bueno, pues nos ponemos manos a la obra y poquito a poco vamos extendiendo el sustrato, la tierra lama. Es pesado pero, con tiempo y una caña...

PREPARANDO PARA SEMBRAR.

Empezamos a preparar los bancales de siembra. Señalamos los lomos para las patatas. Ponemos testigos para que nos salgan rectos. Alomamos y marcamos las lindes del bancal. 

Esto ya va tomando forma. ¡Ánimo!

SEMBRANDO Y APRENDIENDO.

Si bien pretendimos plantar productos autóctonos de nuestras huertas moriscas, la premura nos hizo desistir de ello;  pues,  aunque ya habíamos tenido contacto con los hortelanos del lugar, no pudimos hacernos de las semillas. Contamos también con la inesperada ayuda de un paisano, Benito, veterano hortelano. Nos dio algunos consejos.

Nuestra compañera Pilar nos facilitó las patatas. ¡Estupendas! Los demás productos, en los viveros cercanos.

Comenzamos con los surcos de patatas. Ponemos lechugas y coliflores, puerros y más lechugas, más patatas y fresas, calabacines, tomates, pepinos. 

¡Menudo festival!

GEA PROVEE.

Pudimos sembrar, pero, ¡lástima!, no pudimos cavar la tierra. Vino la cuarentena.

Gea, como siempre, nos da. Con paciencia alimentó sus semillas y nuestra ilusión. Y sin haber vuelto a nuestro huerto, ¡sorpresa! Esto es lo que nos encontramos: patatas, lechugas, puerros. Crecidos. Incluso algún que otro fruto.

Gracias.

CAVANDO.

Pasan los días, y con el permiso pertinente, se ha podido ir a cavar el huerto. 

Se produce la primera cava. Podemos ver el efecto del tiempo. Cómo va consolidándose como un buen huerto escolar. Un precioso huerto escolar.

VAN CRECIENDO.

Días después de la primera cava y tras unos días de lluvia, los productos de nuestro huerto van creciendo poco a poco.

PRIMEROS FRUTOS.

Hola de nuevo.

Tras varios días, este es el aspecto que presenta nuestro huerto. Como podéis ver va creciendo favorablemente. Se ha regado muy poco, pues hemos tenido varios días de lluvia. 

Al no poder venir todos los días, después de una buena cava, se le hace un riego generoso.

Ya van apareciendo los primeros frutos. ¡Unas magníficas fresas ecológicas! 

Al parecer nuestras lechugas deben ser bastante jugosas. Los abundantes caracoles del terreno le están "metiendo mano". Habrá que investigar el modo de hacer que no se arrimen a ellas.